lunes, 31 de octubre de 2022

Panegírico

"Un hombre que no pasa tiempo con su familia nunca puede ser un hombre de verdad"

El Padrino

Fue, con soberana diferencia, el más canalla de nuestra casta. El primogénito del abuelo, el hermano mayor de mi padre, un hombre que se vestía por los pies y, se desvestía mucho. 

Quiso la fortuna, que se le asignase ese papel familiar que implica las funciones de consejo y apoyo extra y cumplió ese papel como todo en su vida, hasta el límite. 

Comparto con él los ojos de la abuela y el nacimiento del pelo que indica la autenticidad genética mejor que una prueba de ADN, mi obstinada autoexigencia y la capacidad de completar lo que me proponga con dedicación, esmero. Era el cocinero de la familia, heredó de su madre su mano para la cocina y de su padre el carácter, la tenacidad y un convencimiento muy profundo de que la familia siempre era lo primero y lo último. 

Fue el PADRE de Rebeca y David, no recuerdo que fuera cariñoso, porque ninguno en esta familia lo es pero siempre (y cuando digo siempre lo digo hasta que duele y arrastra lágrimas) estuvo para todos y para mi. 
Como abuelo de Xavier, Aida y Luis fue divertido y entregado.

Tuvo una vida más allá de la plenitud, porque se la gozó entera. Bailó, Viajó, Trasnochó, Comió y Fumó hasta el séptimo stent coronario, bebió hasta la última Navidad que tuve el honor de compartir con él, porque si a través del novio de su ex-mujer aprendí el significado de la palabra Honor; él era el Honor más grande del desastre de nuestra familia. 

Todo aquel que le conociera tendrá un recuerdo de él, porque era auténtico y encantador hasta niveles de enfermedad. Tocaba la trompeta con fervor, dejó de hacerlo de continuo aunque en alguna celebración, tras varios escoceses a medias con su hermano, su hijo o su ahijada, se arrancase un par de movimientos que recuerdo con la piel de gallina, igual que las veces que me tocó serenatas con toda la banda siendo niña. 

Luchó tanto y tan bien, que se fue completo, tranquilo y en paz dejándome huérfana de Padrino y sin saber a quién le puedo pedir uno de aquellos baños de realidad en los que me enseñó que nadie me iba a regalar nada en esta vida y que, quisiera lo que quisiera, tenía que conseguirlo por mis propios medios. 

Antes de irse me dejó un mensaje tan grande y tan escueto como cabía esperar de él, le dijo a mi padre y hermano que estaba orgulloso de mi (y no lo estuvo de todos). A él no le pudo la debilidad de saberse al final de sus días, ¿acaso se creía la muerte que iba a poder con mi Padrino? 

Si le imagino leyendo estas líneas siento dentro de mí su respuesta tras un contenido silencio cargado de sincero afecto:
"Bien, ¿quieres llevarte una botella de hierbas?".


 y de fondo podría sonar: "Theme from Casanova" - The Divine Comedy 


Cuando estas palabras atribuidas a Anthony Hopkins llegaron a mi pensé en él, porque recogen la lección vital que me dio:
 
′′Deja ir a la gente que no está lista para amarte.
Esto es lo más difícil que tendrás que hacer en tu vida, y también será lo más importante: deja de dar tu amor a los que no están dispuestos a amarte.
Deja de tener conversaciones difíciles con personas que no quieren cambiar.
Deja de aparecer para las personas que no tienen interés en tu presencia.
Deja de amar a las personas que no están listas para amarte.
Sé que tu instinto es hacer todo lo posible para ganar el aprecio de todos los que te rodean, pero también es el impulso lo que te roba tu tiempo, energía y salud mental, física y espiritual…
Cuando empiezas a protestar en tu vida, completamente, con alegría, interés y compromiso, no todo el mundo estará listo para encontrarte en este lugar de pura sinceridad…
Eso no significa que tengas que cambiar lo que eres.
Significa que tienes que dejar de amar a las personas que no están listas para amarte.
Si eres excluido, insultado sutilmente, olvidado o ignorado fácilmente por las personas a las que le regalas tu tiempo, no te haces un favor al seguir ofreciéndoles tu energía y tu vida.
La verdad es que no eres para todo el mundo… Y que no todos son para ti…
Esto es lo que hace que este mundo sea tan especial cuando encuentras a las pocas personas con las que tienes amistad, amor o relación auténtica…
Sabrás lo precioso que es…
Porque has experimentado lo que no lo es…
Pero cuanto más tiempo pasas tratando de hacerte amar de alguien que no es capaz…
Entre más tiempo pierdes privándote de la misma conexión…
Hay miles de millones de personas en este planeta, y muchas de ellas se van a encontrar contigo, a su nivel, con su vibración, desde donde están…
Cuanto más pequeño sigues involucrado en la privacidad de las personas que te utilizan como cojín, una opción de segundo plano, un terapeuta y un estratega a su sanación emocional…
Más tiempo te alejas de la comunidad que deseas.
Tal vez si dejas de aparecer, te buscan menos…
Tal vez si dejas de intentarlo, la relación deje de…
Tal vez si dejas de enviar mensajes, tu teléfono permanecerá oscuro durante días y semanas…
Tal vez si dejas de amar a alguien, el amor entre vosotros se disuelva…
Eso no significa que arruinaste una relación!
Significa que lo único que sostenía esta relación era la energía que solo tú y tú contrataban para mantenerla a olas.
No es amor.
Esto es solo apego.
Es querer darle una oportunidad a quien no lo merece!
Lo más valioso e importante que tienes en tu vida es tu energía.
No es solo tu tiempo, ya que es limitado…
Esa es tu energía!
Lo que das cada día es lo que se creará cada vez más en tu vida.
Los que le darás tu tiempo y energía, definirán tu existencia.
Cuando te das cuenta de esto empiezas a entender por qué estás tan ansioso cuando pasas tu tiempo con personas que no te conviene, y en actividades, lugares, situaciones que no te conviene.
Empezarás a darte cuenta que lo más importante que puedes hacer por tu vida, por ti mismo y por todos los que conoces es proteger tu energía más feroz que cualquier otra cosa.
Haz de tu vida un refugio seguro, en el que solo se permiten personas ′′ compatibles ′′ contigo.
No eres responsable de salvar a la gente.
No eres responsable de convencerles de que deben ser rescatados.
No es tu trabajo existir para la gente y darles tu vida, poco a poco, momento después del momento!
Porque si te sientes mal, si te sientes en el deber, si te sientes obligado, eres la raíz de todo esto por tu insistencia, temiendo que no te devuelvan los favores que les has concedido…
Es tu único hecho darse cuenta que eres el amado de tu destino, y aceptar el amor que crees que te mereces.
Decide que te mereces una amistad real, un compromiso verdadero y un amor completo con las personas saludables y prósperas.
Luego espera… solo por un rato…
Y mira lo mucho que empieza a cambiar todo…»

2 comentarios:

  1. Deus dixit.
    Hay lecciones tan difíciles de asimilar y todavía más de aplicar... Pero, como cuando veías las luz al entender el maldito problema de matemáticas, te sientes tan ligera cuando, por fin, pasas al siguiente nivel. A pesar de los batacazos, las lágrimas y los cachitos de corazón que se quedan por el camino, esas vivencias también somos nosotros.

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  2. ¡Cuánta razón!
    y precisamente la que me ayudaba a dilucidar el problema de Matemáticas me ha dicho exactamente lo mismo. Lo que no sé es si voy a ser capaz de aprender.

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